El nacimiento (o belén) es la decoración básica de la Navidad. Aunque a veces se nos olvide, ese el punto de toda está celebración de abundante comida, bebida y regalos. En México, como muchas otras cosas, los nacimientos no se distinguen por ser minimalistas. Hay de talavera, de chaquira, de barro, de henequén o de madera. Las figuras están adornadas con motivos multicolor y normalmente las rodean decenas de lucecitas, heno y musgo. Los personajes principales son María, José, los Reyes Magos, el ángel y claro, el niño Dios. Pero a veces el espacio designado para representar la humilde llegada de Jesús al mundo es demasiado amplio para tan pocas personas y un pesebre en medio de Belén se convierte en la sede de una megafiesta.
Músicos, cocineros, vendedores, animales y plantas exóticas: todo esto puede encontrar en el típico nacimiento mexicano. No somos expertos en el Nuevo Testamento, pero podemos apostar que ninguno de estos personajes es mencionado en aquel pasaje.
Fotos: Mónica Cruz
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