Hawkers se queda con el canal del youtuber MrGranBomba

El canal de YouTube de MrGranBomba tiene desde la noche del martes el nombre y el logo de Hawkers, la marca de gafas de sol de Elche (Alicante), además de enlaces a sus cuentas de Facebook, Twitter e Instagram. Hawkers ya tenía un canal propio en la plataforma de vídeo, en el que había una veintena de vídeos con cientos de miles de reproducciones, pero contaba con apenas 1.500 suscriptores. Esta cifra está muy lejos del más de medio millón que suma el youtuber, incluso después de haber anunciado su retirada y de haber borrado sus vídeos.

Tanto en Twitter como en Youtube se ha especulado con la venta de este canal a la marca. Verne se ha puesto en contacto tanto con la empresa como con el youtuber, pero ninguno de los dos han querido ni confirmar ni desmentir esta operación. Hawkers siempre se ha caracterizado por llevar a cabo operaciones de marketing poco convencionales y en ocasiones criticadas, como en el caso del hilo de Forocoches en el que se aseguraba haber visto al yeti en la estación de esquí de Formigal. Es decir, no se puede descartar que se trate de una acción publicitaria (o de otra broma) y no de una compra al uso.

Las normas de YouTube permiten cambiar los propietarios y administradores de las cuentas, pero está prohibida la venta sin la autorización expresa de la plataforma, según sus términos de servicio. La plataforma puede eliminar contenido o los canales que infrinjan estas condiciones, aunque desde Google España nos aclaran que no tienen conocimiento sobre este asunto concreto. Y ya a modo de anécdota, el canal de MrGranBomba lleva abierto desde febrero de 2012, mientras que Hawkers se fundó en diciembre de 2013.

El youtuber alicantino de 20 años recibió una bofetada mientras realizaba una broma de cámara oculta en la que insultaba a un mensajero llamándolo “caranchoa”. Ante las críticas y parodias que recibió tanto su broma como la denuncia que puso al mensajero que le agredió, el joven decidió borrar casi todos los contenidos de su canal y dar de baja su cuenta en Twitter. En su perfil solo quedaron dos grabaciones que se realizaron en colaboración con ONGs, que ahora también han desaparecido.

Aunque la operación de compraventa no está confirmada, sí se ha comentado (y criticado) en Twitter. Algunos han apuntado al riesgo de que los seguidores del youtuber no quieran seguir los vídeos de una marca de gafas. El canal ha perdido 2.000 suscriptores desde las 10 de la mañana del miércoles hasta las cuatro de la tarde, si bien es cierto que desde que anunció que dejaba la plataforma, su cuenta ha ido perdiendo algunos centenares de seguidores cada día, según datos de la web de análisis Social Blade.

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