Para la irlandesa Paula Flynn recopilar en una cuenta de Instagram imágenes de las tiendas más bonitas del mundo tiene que ver más con la ética que con la estética. En tiempos de venta y consumo masivos, le apetecía destacar a aquellos pequeños empresarios que apuestan por el cuidado de sus productos. Por eso montó la web The Shopkeepers, con la que poder contar la historia detrás de las fotos que comparte en la red social.
Flynn se formó en el campo del diseño y durante décadas ha desarrollado su carrera en el mundo de la moda. Ha pasado por marcas exclusivas como Karl Lagerfeld y por otras tan populares como GAP. "De repente, todo el sector se transformó por las compras online, así que decidí reinventarme", cuenta a Verne por teléfono desde su casa en Nueva York.
Sin apenas saber nada de redes sociales, descubrió el poder icónico de Instagram. Así que pidió ayuda a su hijo Jack, recién licenciado en Económicas y especializado en apps. También llamó a algunos excolegas de trabajo y juntos fundaron este proyecto.
"Quería compartir con los usuarios todas esas tiendas físicas que admiro y que me inspiran. Es verdad que los clientes tienen ahora mucha información sobre las características del producto que están pagando. Pero yo quería hablar sobre su procedencia y sobre las personas que están detrás, con la esperanza de que quien compra sea muy cuidadoso", explica.
Al principio, la mayoría de tiendas que aparecían en The Shopkeepers eran descubrimientos que hacía la propia Flynn en sus viajes: "Pronto me di cuenta de que eso me limitaba, así que comencé a destacar tiendas que encontraba en Instagram o a través de colaboradores que viven en Europa", cuenta Flynn. Ahora tiene en mente presentar sus contenidos en formato vídeo en un futuro próximo.
Entre sus apuestas particulares, recopila varios pequeños negocios de Tarifa, que conoció en sus frecuentes visitas a Cádiz, mientras su hija estudiaba en la ciudad andaluza. Palma de Mallorca también forma parte del catálogo personal de The Shopkeepers, gracias al éxito que tienen entre los usuarios de Instagram, cuenta.
En su web, Flynn divide las tiendas por géneros. Floristerías, librerías, ropa de hombres, antigüedades, ropa de mujeres... "Las de muebles y decoración de interiores son las favoritas del lector, aunque el sector vintage es también un caballo ganador. Repensar y reusar objetos es un fenómeno social. Incluso las tiendas que no son vintage cuentan con antigüedades para ganar un punto de autenticidad", comenta.
Cafetería en París.
Una tienda de ropa y complementos en Nueva York.
Cafetería de San Francisco.
Librería en Edimburgo.
Tienda de objetos para el hogar en Oxford.
Una tienda de alimentación de Nueva York.
Una floristería de Brooklyn.
Una tienda de artículos para el hogar de Kingston.
Tienda de velas de Charleston.
* También puedes seguirnos en Instagram y Flipboard. ¡No te pierdas lo mejor de Verne!