“Nací un 29 de febrero, el chiste se cuenta solo”

Dicen que “Año bisiesto, año siniestro”, pero para los que cumplen cada cuatro años es su día de la suerte

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A estas alturas, casi todos saben que este 2020 es año bisiesto. Pero, ¿por qué se llama así? ¿quién lo inventó? ¿por qué ocurre cada cuatro años? Y sobre todo: ¿cómo lo hacen todos aquellos que cumplen años solo los 29 de febrero? ¿Qué día les felicita Facebook en los años no bisiestos? Todas estas preguntas que le inquietan en un día como hoy, querido lector, serán contestadas. Así que tome asiento y disfrute de la historia de los FA-BU-LO-SOS años bisiestos.

De acuerdo con la NASA, la tierra rota 365,2422 veces durante una órbita completa alrededor sol, por lo tanto, un año no dura exactamente 365 días, sino que se le suman 5 horas, 59 minutos y 16 segundos. Durante tres años contamos 365 días y es en el cuarto cuando recuperamos el día que falta. Si no agregáramos ese 29 de febrero, las estaciones acabarían hechas un desastre y después de unos cientos de años la Navidad caería en mitad del verano o al revés en el hemisferio sur. De hecho, si no existieran los años bisiestos, este 29 de febrero de 2020 estaríamos a 15 de julio de 2021.

“Nací un 29 de febrero, el chiste se cuenta solo”. Eso dice la biografía de Twitter de Bettie Varela, quien cumple hoy 28 años. Bueno, si somos rigurosos, apenas siete, y como todos los que celebran su cumpleaños cada 29 de febrero ha recibido un sinfín de comentarios de sus amigos, familiares y potenciales parejas cuando la conocen, pues no le creen y le dicen que no puede ser posible que haya nacido justo en ese improbable día (le han llegado a pedir su identificación para verificar el dato).

Cuando le preguntan cómo festeja cuando el año no es bisiesto, dice que los días 28 “porque me gusta el mes en el que nací pero puedo festejar mi cumpleaños el día que quiera”. Como Bettie es bajita de estatura le dicen que sí se le ve la edad. Cuando le preguntan cuántos años va a cumplir, ella responde divertida que siete. “Me dicen: Sí, se te ven tus siete años, apenas vas a entrar a la primaria”. Ya está acostumbrada a las bromas.

¿Bis sextus suena a bisiesto?

De acuerdo con el libro Time Measurment and Calendar Construction (Medición del tiempo y fabricación de calendarios) de B. Richmond, la culpa fue del emperador Julio César, quien, en el siglo 1 a.C., encargó a los astrónomos mejorar el antiguo calendario juliano, pues no era lo suficientemente preciso. Para introducir su novedad - el maravilloso año bisiesto - , Julio César intercaló un día entre los días que hoy llamamos 23 y 24 de febrero.

Este día adicional fue llamado bis sextus dies ante calendas martii, es decir, "repítase el sexto día antes del primer día del mes de marzo", y el año que contenía ese día se llamó bis sextus, según explica el libro Perennial Calendar (El calendario perenne) de T. Forster. En 1582 sufrió algunas modificaciones impuestas por el papa Gregorio X, que dio origen al calendario gregoriano que usamos hasta hoy.

Karla Flores, quien cumple 32 u 8 años, según cómo se mire, cuenta que cuando cumplió 24 (es decir, 6) sus papás le hicieron una fiesta temática como si fuera una niña que apenas pasa del lustro de vida: “Me llevaron una piñata, y pastel y un brincolín (castillo hinchable) fue todo un show, como si hubiera cumplido 6 años. De hecho mi pastel decía 6 años. Estuvo muy chistoso porque la gente no sabía que estaba pasando”.

Pero, también hay excepciones en los años bisiestos. Insertar un día extra cada cuatro años agrega aproximadamente 45 minutos adicionales a cada ciclo bisiesto de cuatro años, tal y como recuerda este artículo del portal de la NASA. Esto se debe al redondeo: cada año tiene 5 horas, 59 minutos y 16 segundos extra, no seis horas. Esos 45 minutos extra que se generan cada cuatro años supondrían que, cada 400 años, sumaríamos tres días más. Para corregir eso, los años que son divisibles por 100 no tienen días bisiestos a menos que también sean divisibles por 400. El año 2000 fue bisiesto, pero no lo fue 1900 ni lo serán el 2100 y el 2200, por ejemplo. 

Los años bisiestos no tienen muy buena fama y es que han coincidido con acontecimientos trágicos como el hundimiento del Titanic (1912), el comienzo de la Guerra Civil en España (1936), el asesinato de John Lennon (1980) , de Gandhi (1948) y de Martin Luther King (1968). En 1812, Napoleón perdió 500.000 hombres en la invasión a Rusia, en la llamada ‘Guerra Patriotíca de 1812’, solo sobrevivió un 20% del ejército de la Grande Armée, lo que constituyó el mayor fracaso del militar francés. Sin embargo, si has creído que se trata de que los años bisiestos traen mala suerte, es solo que tus sesgos te engañan: el cerebro busca patrones que no existen, como cuando relacionamos muertes con los goles del futbolista Aaron Ramsey.

Ventajas y desventajas del cumpleaños bisiesto

Una de las ventajas de cumplir años el 29 de febrero es que todos se acuerdan de ti en una fecha tan especial. Cuando llega el año bisiesto las felicitaciones llueven: “Ese día recibo muchísimas felicitaciones de gente que ni me acuerdo”, dice Karla Flores, “Es un día en el que la mayoría puede festejar contigo porque nadie tiene planes. Si organizo una fiesta ese día todos van”.

“Es una cosa curiosa porque durante años no cumples y, en mi caso, los 29 de febrero los celebro con fuerza, como un día muy especial, porque quién sabe después qué va a pasar los siguientes cuatro años. Por suerte, mi mamá cumple el 1 de marzo y hacemos sinergia para que no se olviden de mi cumpleaños”, dice Fran Casamayor, que cumple 32, y en años bisiestos como este, le dicen: “Este año sí que sí, aprovecha que los siguientes tu día desaparece del calendario”. Si no lo dicen, “no se quedan contentos”, asegura.

Pero cuando el día no aparece en el calendario aparecen los pretextos. “No te felicité porque estuve esperando el 29 de febrero y nunca llegó”, “ay, ya cambió el reloj, ya son las 12, ya es primero de marzo y ya pasó tu cumpleaños”, “pensaba felicitarte el 28 y luego no supe si el 28 o el 1 de marzo”... etc.

Bettie Varela, Karla Flores, Brenda Piña y Fran Casamayor. Los protagonistas de esta historia

¿Y qué pasa con las notificaciones de Facebook cuando no es año bisiesto? Los amigos de Bettie Varela se sorprendían de ser notificados el 28 de febrero y el 1 de marzo: “para aquellos envidiosos que decían que no tenía día para festejar mi cumpleaños, pues tengo dos”, bromeaba con sus amigos.

Rocío Piña, que hoy cumple 24 años, nunca ha podido validar las promociones de los restaurantes en los que el día de tu cumpleaños te ofrecen alguna comida o bebida gratis. “Los 29 de febrero me dan felicidad porque ahora sí es mi cumpleaños y este en particular lo voy a festejar, pues mis compañeros de generación me dicen que nunca les tocó que tuviera un cumpleaños real”.

Cerca de la frontera con México, en Anthony, Texas, Rocío, Bettie, Karla y Fran podrían sentirse como en casa, al menos el día de su cumpleaños. En 1988 dos vecinas de la localidad propusieron a Anthony como la Capital Mundial del Año Bisiesto y desde entonces cada 29 de febrero se realiza un festival de cuatro días que incluye una enorme cena de celebración para todos los que cumplen años.

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