Esta ilustración de leyendas de terror está llena de nostalgia. Primero por su formato de monografía, la clásica lámina que comprábamos en la papelería para hacer la tarea antes de Google. Y después porque contiene algunas de las historias tenebrosas más escuchadas por los mexicanos desde la infancia. No todas son referencias antiguas, como notarás al ver que La Llorona tiene la cara de Kim Kardashian y que la bruja del coche rojo es muy parecida a Paris Hilton. Su autor, Raúl Moyado Sandoval, ha reinterpretado algunas historias para adaptarlas a la cultura de Internet.
Leyendas de terror en México es la séptima memegrafía que realiza el artista visual de Baja California. La primera se llamó 2016: Año de la ver$&, y hacía un recuento de los acontecimientos más virales y tristes del año pasado. Moyado compartió su memegrafía más reciente este jueves en la página de Facebook del mismo nombre, a propósito de las próximas celebraciones de Halloween y el Día de Muertos. En un día se ha compartido más de 4.200 veces.
Estas viñetas, escribió el autor junto a su ilustración digital, son para "recordar aquellas leyendas que nos marcaron en la infancia. Aquellos tiempos antes de los videos de gemidos, cuando le teníamos miedo a La llorona y nos desvelábamos paniqueados viendo las ultimas noticias sobre el chupacabras, aliens con brazaletes o casas embrujadas".
Con ayuda de Moyado, quien respondió a las preguntas de Verne vía correo electrónico, repasamos cada una de las historias de terror que cuenta en su memegrafía.
Tu escuela fue un cementerio. "En la primaria acudí a varias escuelas, tanto en el centro como en el norte del país, y en casi todas escuché una historia similar", cuenta el artista visual. No era difícil imaginar que algo muy tenebroso había sucedido en esos grandes espacios convertidos en salones de clases. Pero las leyendas eran variadas. Si la escuela no estaba construida sobre un panteón, una niña había muerto en el baño o el fantasma de un antiguo director habitaba en la biblioteca.
Cazadores e investigadores de lo paranormal. El enfrentamiento de Carlos Trejo y Jaime Maussan aparece en el primer plano de la memegrafía. Uno es el cazafantasmas mexicano, autor de Cañitas y el responsable de invocar con una ouija a un demonio que supuestamente habita en una casa de la Ciudad de México. El otro es el incansable buscador de vida extraterrestre, que a pesar de sus múltiples avistamientos y registros no ha logrado que nadie haga nada. Moyado se declara miembro del equipo Maussan pero reconoce a ambos como personajes interesante de la cultura popular. "Espero vivir para el día en el que Maussan o Trejo nos reclamen a todos con un 'Se los dije", afirma el artista.
El carro rojo y el charro negro. Son dos leyendas en una sola viñeta. La primera cuenta que en la carretera que va de la Ciudad de México a Cuernavaca circula un coche color rojo que solo los hombres pueden ver. A bordo viajan dos o tres mujeres guapas que seducen a los hombres para lograr que suban al auto. Después los matan, utilizan su cuerpo para rituales y los abandonan en el camino. El charro negro hace algo similar, pero con las mujeres y montado en un caballo. Se dice que si una infortunada sucumbe a sus encantos y sube con él, ya no podrá bajar y nadie volverá a verla.
Tazos y juguetes asesinos. En esta ilustración conviven viejos juguetes que en su momento tuvieron fama de ser satánicos: un pitufo, un troll, un furby y un tazo de Elvira. "Una leyenda urbana contaba que una niña estaba jugando con el tazo de Elvira cuando de repente esta se salió del tazo y quiso matar a la niña", explica Moyado. "Se comenzó a especular sobre si Elvira era satánica por tener un cráneo en el moño e incluso hubo párrocos que incitaban a los padres a retirarles los tazos a los niños, y se hicieron quemas públicas en las colonias".
Mensajes subliminales diabólicos. Muchos crecimos creyendo que los cassettes de varios músicos estaban intervenidos con mensajes perversos que solo podían ser escuchados al tocar las cintas revés. Se rumoraba que estos podían encontrarse en los discos de artistas como Gloria Trevi, Michael Jackson, Maná o Shakira. "Creo que cualquier cosa que llegaba a ser popular era susceptible de ser acusada de satánica", dice Moyado. En su ilustración se ve a un chico un tanto perturbado con su grabadora y al fondo unos textos que solo pueden ser leídos a la inversa.
La leyenda del chupacabras y la crisis de los noventas. Este monstruo humanoide-alienígena atacaba de noche a las cabras y encima lo hacía durante uno de los momentos económicos más complicados para México: la crisis también conocida como Efecto tequila o Error de diciembre. "Existen ciertas teorías de conspiración que definen la leyenda como parte de un distractor social", apunta el artista de Baja California. En su viñeta, es un vaquero el que encuentra al chupacabras, ya que los ganaderos "usualmente eran los testigos de aquellos sucesos".
El señor (o el viejo) del costal. Esta leyenda era la preferida de los papás y los abuelos, que ante cualquier desobediencia de los niños soltaban la amenaza de que vendría por ellos el viejo del costal. La historia completa no es tan conocida, pero sí muy escalofriante. Se dice que este señor era un curandero con buena fama y que a un enfermo de tuberculosis le recetó beber sangre de niño si quería sanar. Entre los dos hombres se robaron a un chico que jugaba en la calle y lo metieron a un costal. Después le hicieron un corte en la axila para extraerle la sangre y abandonaron su cuerpo en el bosque.
La leyenda de la llorona. El lamento de la mujer que perdió a sus hijos y se volvió loca es probablemente la línea más famosa de las historias de terror en México: "Ay mis hijoooooos". Moyado no quería hacer "la típica ilustración tradicional de La llorona", y por eso decidió "reinterpretarla satíricamente" con un meme. La dibujó con el rostro de Kim Kardashian por el meme de Kimmy llorando (crying Kimmy), que se utiliza casi siempre para burlarse de alguien que llora por trivialidades. Aunque ese no fuera exactamente el caso de La llorona.
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